La práctica fue liviana, apuntando a recuperar el aire perdido en casi dos meses de arena, noche y barra libre. Se comenzó con un trote suave, pasando luego a veinte minutos de paso ligero (salvo Neto, el Rayo y Atila que pidieron un fono-taxi para terminar las últimas vueltas).
Luego de unos pocos abdominales y flexiones, los dirigidos por Martín se divirtieron en un picado amistoso, que dejó algunas cuestiones interesantes para desgranar. Las chicas jugaron a cara de perro, robando pelotas, corriendo al vacío y demostrando que están en un nivel ascendente; tal es así que hay rumores de que ya comenzaron las tratativas para que Pili se incorpore a préstamo a Buena Yunta, con vistas a ganar el torneo interno de otoño. De los cruzados, fue auspiciosa la recuperación de Civitillo, que corrió incansablemente cada pelota, anticipando que este año el puesto de lateral por izquierda tiene, a priori, un dueño firme. Rama Alonso sigue intacto en su calidad de goleador, aunque esta vez se encontró con un Atila más atento que en la final del interno de primavera 08; sólo pudo concretar un gol después de varios disparos desviados por el experimentado guardavalla. Otro que sorprendió al cuerpo técnico fue Korganoff, quien luego de un centro impecable apareció sin marca para destilar un cabezazo violento, que pegó en el travesaño de Atila y se metió con furia.
Todo parece indicar que este 2009 será un año positivo para los equipos sanandresinos. Si los planetas permanecen alineados, todos los lesionados estarán listos para arrancar el torneo de ADAU, y en poco tiempo estarán disponibles las obras que permitirán contar con agua potable en la cancha y una nueva torre de iluminación para poder entrenar más tarde (medida que favorecerá a los trabajadores que no se resignan a que la lucha por el capital y la plusvalía los aparte del verde césped). Por el momento, tanto hombres como mujeres entrenarán los miércoles a las 17:30 y los jueves a las 19hs. Igualmente, sobre la marcha se irán acomodando estas opciones en caso de ser necesario.
Sólo resta esperar que la mística generada el año pasado siga intacta, que las Panteras sigan su crecimiento exponencial y que Miller siga arengando a las masas, ya que, como dijo en su profético mail de colección: “¿Qué pasa guachos? Presten atención… podemos hacer MÁS, este año podemos pelear y campeonar… al final del año las cosas se consolidaron mucho, se notaba desde afuera, y si nos metemos de vuelta por ese camino (y rápido) podemos a apuntar a cosechar 3 puntos en cada partido, y por lo menos nunca resignar puntos en casa. (…) si hacemos las cosas bien vamos a campeonar, necesitamos todos empujar en la misma dirección”. Que así sea.
El Cronista
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